miércoles, enero 18

Opio.

Confusión es la única palabra que pasa por mi mente ahora. 
Al tener la laguna de Guatavita enfrente, un paisaje indescriptible, completamente hermoso, una cerveza, un cigarrillo y mi fiel amante, la luna; siento que estoy en una historia completamente inefable. Donde a veces soy la antagonista y a veces, solo a veces la que logra derrotar a todos los villanos. ¿Heroína? Tal vez. Quién sabe. Solo necesito mi agendita y un lápiz. La inspiración siempre la he tenido, todo el mundo la tiene, así sea insignificante a la vista. Y aunque no escriba bien, todo va dirigido a la misma persona. 

Tengo en mi iPod al máximo volumen con algo de Ray Charles, siempre estoy de buen humor cuando lo escucho, saca a esa loca por el Jazz que llevo dentro, esa loca que siempre quiere estar bailando, esa que se esconde bajo unas cuantas lágrimas. 

Es increíble como una canción puede hacerme sentir tantas cosas, como un artista puede crear tal frenesí. Y estoy segura que no soy la única que ha sentido la melodía entrar a su cabeza, alborotar todos los sentidos y luego, bueno... quedarse ahí un buen tiempo. Horas, días y hasta semanas. 

Janis Joplin, Silvio Rodriguez, Sigur Rós, Laura Marling, Astor Piazzolla y hasta Haggard, han estado en mi cabeza toda la noche y me importa poco o nada si me rompo los tímpanos con tanto volumen. Me encanta. Así es que es. 
''Mariana la sorda'' por culpa de sus audífonos y su terquedad. Eso dice mi mamá.
No es terquedad, es un escape. 

La verdad no quiero hablar de temas que me hagan sentir mal de nuevo. Ahora soy solo yo. 
Ya me cansé de la máscara, me cansé de sonreír todo el tiempo, de fingir que todo está bien cuando no lo está. Quiero volver a Manizales. :(

Quiero acostarme sobre un prado, tendida cual muerto a contemplar las estrellas (de nuevo), pero esta vez poder tomar la mano de alguien en quien pueda confiar, dormir mientras la luna nos arrulla y los mosquitos nos pican. 

Saltar al ritmo de Sex pistols, The Ramones, P.O.D, System of a down, Franz Ferdinand, sin que nada más importe. Sin que exista ninguna puta excusa para disfrutar esa música.  Esa música que mi mamá detesta y mi hermana ignora. ¡Pendejas!

Dejar que me invada la música, solo eso. Bueno, también un hombre. Él. 
Que invada cada uno de los rincones de mi cuerpo, que recorra mi alma, que deje su perfume impregnado en mi piel, un rasguño, un mordisco, que sus besos me enloquezcan, sus brazos me protejan y que su mirada me haga pecar.
Al fin y al cabo para eso estamos acá, para pecar. ¿Y qué mejor pecado que la lujuria?

      Me leyera mi abuelita, estaría desheredándome. ¡Jajaja! -¡Mijiiiiiitaaa!- 

Entonces llega Calamaro con una de sus canciones y ¡PUM! directo a la yugular. Te luciste Andrés Calamaro, te luciste. Lograste bajonearme de una. Recuérdenme que tengo que hacer a un lado esa manía de dejar que una pinche canción me afecte tanto. ¡TENGO QUÉ!
La conclusión y aunque ya todo el mundo la sabe: sin música no puedo vivir. Ese es mi opio, ese y otros que no pienso mencionar.



Si voy a pasar el resto de mi vida a tu lado, que sea en una estrella. En donde podamos contar humanos, en donde podamos disfrutar nuestro amor.
                                                                                   Mariana Domínguez Maus.
                                                                                          Nov -16 -2011


(Valeria Durán. 18 Ene 2012)

lunes, enero 16

Nota mental.

No sé que tan grave sea lo que tengo en el corazón, pero de algo estoy segura y es que no me va a dejar vivir tranquila, al menos no ahora. Sabía que podía sufrir del corazón (Por mi papá), pero jamás le presté atención. 
Muchas veces uno ni se da cuenta de las oportunidades que le da la vida, Dios, el destino, la suerte (?) (O quien sea el que nos esté controlando) y si lo hace, ya es muy tarde para dar vuelta atrás. Al menos así me pasó. 

No me pregunten el porqué de esta carta, no tengo ni puta idea. 
Supongo que tengo miedo de irme, bueno.. no de irme, al fin y al cabo todos vamos a morir. No tendría porque tener miedo de morir. Es algo así  como nostalgia, porque a pesar de todo lo que he pasado; momentos horribles, la muerte de mi papá, me han mandado a comer mierda, he estado deprimida, podría decirse que muchas veces morí en vida y para mí, eso es mil veces peor que la muerte física, en general he vivido.. bien, dentro de lo normal. 
Nací, crecí, aprendí, lloré. He disfrutado bastante (La gente que me conoce, sabe de lo que hablo)

No digo que espero la muerte con ansias, no creo que ninguna persona consciente quiera morir a esta edad, ame nos que esté en otras circunstancias.. eso depende de muchos factores. Pero queda muchísimo camino por recorrer, muchísimas personas por conocer, muchísimos sitios por visitar, en fin.. muchas cosas por aprender. 
Pero... quién coños puede controlar la muerte?
Nadie. Así lo veo yo. 

Me siento como escribiendo un testamento o algo así, solo que en vez de dejar mis pertenencias a los que me conocen, les dejo mis pensamientos. Creo que muchas veces eso es más valioso. Es raro tener que expresarme aquí, todos saben que me gusta escribir, pero esto... bueno, es raro y ya. 

Luego de que murió mi papá, estuve mal por un tiempo, no fue nada fácil. Es más, aún es una de las cosas que me causan mucha tristeza; tener que llegar a casa y no encontrar al hombre que me cuidó, me acompañó y enseñó tantas cosas por tantos años. Pocos supieron lo de su muerte, intenté parecer fuerte, intenté ocultar la tristeza, el miedo a perder a mi mamá, las lágrimas, muchas veces parecía que lo había superado, pero no fue así. Ocultando lo que sentía solo me hacía más daño. Qué estúpida. 

A mi lado tengo a mi hermana, bueno, no a mi hermana biológica. Mi amiga de toda la vida. Me está casi que insultando; dice que parezco viejita pensando en la muerte a estas alturas de la vida. Pero sé que es consciente de mis problemas de salud y sé que contempla la posibilidad de que vuelva a enfermar. Aunque está confiada de la operación que me harán la próxima semana, todos confiamos en que va a salir bien. :)

Ya he hablado con mi mamá sobre esto y no quiero escribirle cosas que puedan afectarla más. No me siento del todo bien, pero tampoco es para tanto. Muchísima gente con problemas cardíacos ha vivido por muchos años (Soy fiel testigo de eso). Además, ya lo dije, en estos meses he pasado por cosas por las que vale la pena seguir luchando. La universidad, mi mamá, mi hermana, mi hermano que está siempre tan pendiente, el trabajo.. bueno, todo eso para vivir decentemente en este país de porquería. Hay que aceptarlo. 

La felicidad es tan relativa, pero a pesar de todo lo que ha pasado, soy completamente feliz. Tengo a mi familia, mi casa, estudio, amigos en los que confío, amo profundamente a un hombre. Y así todos se limiten a comparar la felicidad con la superficialidad, con lo que tengo hasta ahora, soy feliz. Mucho. 

¿Porqué odian hablar de la muerte? Digo, tienen que enfrentarla algún día. Cada vez que intento hablar con mi mamá, con Manu, con José, y hasta con Valeria me cambian de tema. Pero es que es inevitable, creo que todos han sentido esa curiosidad, saber qué hay luego de la muerte física. 
¡Jajajá! Valeria es la mejor, lo único que me dice es: ''Cuando vayamos a un concierto de The Cure, Arctic Monkeys o Death Cab for Cutie juntas, se puede morir, antes no'' Ha sido un gran apoyo, no sé que haría sin ella. Así sea una hijueputa con todo el mundo, hasta conmigo. Acabo de prometerle que iríamos juntas a violar a Robert Smith. ¡QUÉ CLASE DE PROMESA ES ESA! ♥

También prometí encontrarme con el hombre que amo. De hecho juré que hablaríamos toda la tarde, que me podía llevar el desayuno a la cama, que me pondría una de sus camisas, que le demostraría que puedo comer más que él, que lo mataría a besos, que le susurraría muchas cosas, que lo abrazaría tan fuerte que se cansaría de mí, prometí darle una sorpresa, prometí amarlo siempre. Y no pienso irme sin cumplir todo.
Bueno, ya lo amo, con todas mis fuerzas, con todas mis ganas, con todo mi ser. 
Él sabe que es mi mejor aliado, mi mejor cómplice, mi amigo, mi novio con flow, mi amante. Éso no se discute. También sabe que si algo me pasa, mi corazón siempre será suyo. A pesar de la distancia y de todas las estupideces que dije e hice algún día. 

Realmente no sé para qué y para quién sigo escribiendo. 
Supongo que luego de un tiempo, cuando lea esto me reiré. Suelo decir muchas pendejadas, además ¿para qué más? suficiente con twitter. Aunque, ahí no todo es pendejada, conocí, o bueno... he hablado con gente con la que me la llevo muy bien, que espero no se queden solo como conocidos de la 2.0. Crispín, Andrés Felipe, Juan Carlos, Ángela, Bah'.. si me pongo a nombrarlos aquí me quedo toda la noche. Solo diré que a Omar le debo unas cuantas tazas de té, un libro y él debe mostrarme su libro de poesía, a Andrés Felipe unas cervezas y a Sebastián (El loco que me entiende perfectamente), una ida a Cali, que por cierto debo hacer el mes que viene y ajá, joderle la vida por un rato. 

El caso es que siento que a muchos de ellos llegué a estimarlos, hasta a quererlos.. suena ilógico, para unos sonará estúpido. Pero así es, soy hijueputamente sentimental y cuando una persona encaja muy bien conmigo, hago todo lo posible para integrarla a mi vida, para quererla. Croe que eso es malo en cierto punto, no sé. 

Había escrito otro pedazo, pero no sé dónde carajos lo puse, así que no siendo más.. iré a dormir. Ya Manuela se durmió, la aburrí con tanta maricada. 
Espero no haber aburrido al que leyó o está leyendo esto. No es mi intención. 

Creo que esto es como una nota mental, una muy larga. Y también creo que soy adicta a twitter. Maldita sea. 
Una última cosa, al que esté leyendo le pido el favor escriba esto en mi blog, le dejo mi user y mi clave en la mesa de noche. (Solo si llegara a pasarme algo.) Esperemos que no sea así y que mi corazón esté mejor para el otro mes. 

Por si acaso, nos vemos en la mierda, o donde sea que vayamos. 
Con amor, Mariana Domínguez Maus.
12 de Enero - 2012


Soy Valeria Durán, la mejor amiga de Mariana. Ella falleció el 15 de Enero al la madrugada por un paro cardíaco, nadie la escuchó. Creo que la más sorprendida soy yo,  estuve con ella casi toda la semana y estaba perfectamente, hasta me dijo que quería que la acompañara a Ibagué, estaba loca, pero tenía un poder de convencimiento tan grande que decidí acompañarla. Dijo que sería su cómplice por un día. (Confieso que no sé de qué carajos hablaba, pero llevaba planeándolo hace varias semanas.) Era de mi misma edad, lastimosamente su enfermedad del corazón era hereditaria. Le iban a realizar una cirugía la siguiente semana, pero se adelantó. 
Nos dejó. La muy tarada se fue y me dejó con las ganas de ser su cómplice por toda la vida. Encontré esto en su mesita de noche, escribió otras cosas, pero no estoy muy segura de poder escribirlas acá, no tiene sentido perder el tiempo escribiendo lo que pensaba a gente que quizá no va a leer. Pero ella me lo pidió. 

La amo y la amaré siempre. 

lunes, diciembre 5

Celeste.

Mis puntos de escape se han oscurecido contigo y el amor por estos días tiene cierto sabor amargo. 

La incertidumbre alimenta mi caminar y en un acto exagerado de hipocresía me levanto y le niego al cielo lo que siento por ti, le niego a tu sonrisa los múltiples deseos que aparecen en mi mente al verla, le niego a tu voz las ansias de escucharla, le niego a tus ojos el insomnio que me producen.
Hoy no puedo cantar, no puedo callar, no puedo gritar ni reír. Solo puedo dibujarte en mi mirada perdida haciendo mil maromas con mi ser. 


Y aquí me tienes sentada en una nube oscura que amenaza con unirse a la tormenta, acá estoy, junto a ti, esperando una señal para seguir armando cuentos. 


Hoy todo se reduce a tu nombre y solo me queda odiarme con unas fuerzas más débiles que las que tengo para quererte. Me queda odiarte a ti; odiarte dulcemente, dándote protagonismo en mis noches de fríos silencios y soledades alegres. 


jueves, noviembre 17

Oscuro.

Sé que somos una amarga y continua despedida, absurdas ilusiones y deseos de estar juntos, que vienen y van sin que nada importe, lágrimas de tristeza cada vez que recordamos lo que sentimos, sé que somos más angustias que alegrías, más dolor que placer.


Y lo único que anhelo es ser uno solo contigo, anhelo ser tu sombra, tu soporte.
Que seamos sol, seamos rocío de las mañanas, seamos suspiros perdidos en el viento.
Seamos amantes, prófugos de las penas, seamos humo azul.


Seamos inefables y arraigados al amor.
Seamos corazonadas.
Seamos hojas y letras.


Lo único que quiero es ser a tu lado. 
- Mi corazón queda en las mejores manos. -

jueves, noviembre 10

Transparente.

Quisiera saber qué piensa cunado camina.
Cuando mira al cielo, cuando se ve al espejo.
Quisiera caminar hacia él, que me vea y me espere paciente.
Que observe mi cuerpo desnudo.
Que en ocasiones sintiera mis pensamientos.
Que lea las cosas que dibujo en mi mente.
Todas son para él.
Abordar su alma y preguntarle tantas cosas.
¿Qué piensas? ¿qué sientes?
¿Me piensas? ¿me sientes?
Quiero escucharlo hablar; hablarme.
Quiero que sienta el calor de mi mirada en él, en todo él.
En todo lo que es.
Quiero un beso, un beso del alma.
Un beso de verdad, de esos que solo se dan con la coherencia y las ganas del momento.
De esos que uno cree que ya no existen.
De esos pocos que he dado.
Quiero estar a su lado, sentir que lo demás no importa.
Seremos más que uno.
Él, la brisa, los besos y yo.


- Que mejor música, que el rocío humedeciendo mi rostro; mi cuerpo. -

martes, noviembre 8

Turquesa.




Desperté y por alguna razón siento que algo me falta.
No sé que es, pero necesito averiguarlo.

Me levanto de la cama buscándolo, con una jaqueca implacable que me aturde y un dolor que recorre mi columna logra dejarme sin alientos.
Una inclemente llovizna humedece el asfalto, que se rinde ante los pasos apresurados de quienes quieren huir. En mi mente, un par de niños jugando en medio de un aguacero, me recuerdan sus consejos, su amor.

Encontrarse frente a frente con la espantosa realidad, que sean mis ojos lo que contemplen lo que ha hecho mi corazón, mis oídos los que escuchen el placer, que al jugar con el destino mi esencia esté encantada, totalmente anonadada por tal espectáculo, que mis manos sientan deseo y lujuria al tocar su alma, sentir sus sueños, sus esperanzas, sus más íntimas fantasías, poder corroborar que estoy con su verdadero ser.

viernes, noviembre 4

Aguamarina

Lo siento por mis pulmones, pero fue casi inevitable sentarme toda la noche e invadirlos con un poco (mucho) humo, ya ni sé cuando fue le última vez que lo hice y mentiría si digo que no lo volveré a hacer.
No sabía que tenía alas y podía volar tan alto, más allá que cualquier pesadilla y mucho menos que podía escapar a los problemas con una simple sonrisa, aún sabiendo que las razones para llorar son infinitas; te tengo y ya no hay nada que perder es hora de vivir un poco.
'Dejaré de hacer el papel de guardián porque las puertas del corazón estarán abiertas a quien desee pasar' eso me dije a mí misma, la verdad no estoy dispuesta a tener más desilusiones; pero que más da.

Derrumbé el techo que me impedía ver la infinidad y le otorgué al cielo la oportunidad de refrescar mi ser; y viendo la majestuosidad del infinito, las estrellas, las nubes; fui del todo feliz.
Llegué a confundir todo, dolor de cabeza, dolor de estómago, aquello que sentía en el corazón que aún no he descubierto las razones concretas, ojeras, mareos, llanto, tristeza, ira, decepciones, hasta pensé en dejarlo todo atrás y seguir como si nada, pero sería injusto. Con él, conmigo, con todos.

La alegría es algo fugaz con lo que he aprendido a jugar.

martes, noviembre 1

Violeta.

Abro las cortinas y lo único que adorna el cielo es un gris claro, un intento de azul para ser sincera. En la ventana; mi rostro pálido y áspero, los ojos apagados que combinan con mi enfermizo aspecto, escriben en el viento unos garabatos que quieren ser despedida.
Un fuerte dolor me ataca sin aviso, miles de recuerdos entrometidos se pasean detrás de mis párpados y lo único que sé es que el verbo recordar se ha vuelto mi enemigo. La jaqueca me impide llorar, pero las lágrimas son interminables.


Porque es preferible el llanto al silencio, 
porque es preferible el dolor al falso amor,
porque es preferible tu felicidad que mi poca alegría,
porque es preferible contigo que sin ti.

lunes, octubre 31

Me acompañan.

La laguna de Guatavita justo frente a la casa, la luna, el frío que prácticamente está matándome, los grillos que parecen querer unirse a mi pena, estoy completamente sola, contemplando tal paisaje por la ventana como si pudiera salir y zambullirme sin ningún problema, como si nada hubiese pasado, las ojeras inocultables, y ese suspiro continuo que queda luego de llorar, cuatro paredes, nadie me escucharía así gritara con todas mis fuerzas, ni si quiera los vecinos que están como a 200m.
Y para ser sincera, desearía que él estuviera aquí, que me abrace, que estemos en el balcón hasta la madrugada, eso quiero; que me bese, poder sentir su calor y dejar de lamentarme por un rato. Bah' mejor disfruten de la vista, por hoy no pienso escribir más.


Lista infinita.

¿Cómo saber si te corresponde, si te quiere, si estará contigo siempre, si te besará y abrazará cuando lo necesites? ¿Algo ridículo, no?

¿Pesimista? solo hago preguntas que TODO el mundo se ha hecho, no más.

Solo lo sabes cuando experimentas, cuando dejas tu mente y corazón abiertos, expuestos, corriendo el riesgo de salir herido, sin dejar a un lado las posibilidades de herir; encontrar la persona que te estremezca completamente, que abrume tu vida de una manera  perfecta.

Lo conoces.                   
Te gusta.
Hablan mucho.
Trasnochan.
Te hace feliz.
Lo haces feliz.
Lo abrazas.
Compartes.
Lo escuchas.
Te escucha.
Lo miras a los ojos.
Lo acaricias.
Lo pellizcas.
Lo muerdes. 
Lo admiras.
Lloras.
Lo gritas.
Te entregas.
Duermen juntos.
Comen.
Se embriagan.
Lo ignoras.
Le escribes.
Lo quieres.
Lo odias.
Se va.
Te odia.
Cocinan.
Te ama.
Vuelve.
Te excita.
Te escribe.
Preguntas.
Sexo.
Bailas.
Dibujas.
Lo piensas.
Caminan de la mano.
Callan.
Lo mandas a la mierda.
Te lo encuentras en la mierda.
Lo recuerdas.
Te arrepientes.
Excusas.
Perdonas.
Confías.
La hijueputa distancia.
Joden.
Lo observas.
Lujuria.
Te observa.
Peleas.
Tardes y noches.
Babosadas.
Besos vienen y van.
Ternura.
Pasión.
Olvido.
Sonrisas.
Bromeas.
Lo amas...

Tantas cosas que puedes hacer cuando estás con 'El amor de tu vida'. Sí, en comillas, porque nunca sabes que zancadilla puede ponerte el destino; aunque a veces es bueno tropezar y más cuando se trata de amar.
Volvería a caer, es más, creo que estoy apunto de hacerlo.

       El único dulce que quiero probar esta noche, es su boca.